Cuestionando la posición boliviana en sentido de esperar un fallo equilibrado de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en el caso de la demanda chilena contra Bolivia por el uso de las aguas del Silala, el abogado, Víctor Hugo Chávez, advirtió sobre la peligrosidad de aguardar una determinación con características “salomónicas” como se indicó desde Cancillería tras la finalización de los alegatos orales en este proceso.

En contacto con EL DIARIO, el jurista que planteó, en primera instancia, la demanda marítima para el cumplimiento del Tratado de 1904, advirtió que esta estrategia corre el riesgo de convertirse en un nuevo revés para las aspiraciones nacionales.

Chávez lamentó que el equipo boliviano encargado de representar al país ante la instancia de justicia más importante del mundo no aprenda de los errores pasados y nuevamente se espere un fallo equilibrado en el que se aspire a una negociación solamente.

Precisó que todos los posibles escenarios en los que se inste a una negociación entre ambos Estados para el uso de este recurso hídrico, representarían una derrota para la soberanía nacional.

“No aprendemos, porque estamos esperando el fallo salomónico, pero incluso este tipo de fallos en el tema del Silala, es decir, que se determine un uso compartido al 50 %, en algún otro porcentaje, o que mande a los dos Estados a negociar un futuro tratado, o se ratifique el preacuerdo del 2009. Los tres escenarios son perjudiciales para los derechos de Bolivia”, sostuvo el jurista.

Teniendo en cuenta que en la actualidad no existe ninguna norma o determinación que obligue al uso de estas aguas, de forma equitativa, y se aspira a un fallo que obligue a una negociación, este debe ser considerado como una afectación al derecho soberano con el que cuenta el país. “En definitiva, ese fallo, aun siendo salomónico nos cercena por lo menos alguna parte de nuestra soberanía en el Silala”, manifestó

En este sentido, Chávez demandó a las autoridades hacer lo posible para que al momento de dejar el poder, la soberanía nacional sea entregada en las mismas condiciones de cuando asumieron el mando.

“Evo Morales ha recibido el Silala y el territorio boliviano con un 100 % de soberanía y el Movimiento al Socialismo tiene que entregar, cuando se vaya, con ese mismo porcentaje. No con una soberanía mutilada”, indicó Chávez.

El experto recordó que Bolivia ya atravesó por una situación en la que se esperaba un fallo equilibrado por parte de La Haya, esto en la demanda boliviana contra Chile de 2013, con el objetivo de que esta Corte reconozca y declare la existencia de una obligación chilena de negociar con el país un acceso soberano al Océano Pacifico en base a compromisos asumidos. “Lo que el Gobierno quería hacer es un trabajo facilito”, sostuvo.

Esta demanda estaba sustentada en que la CIJ comúnmente asume posturas y fallos equilibrados y salomónicos, esperando que nuevamente esta instancia señale que se debe negociar. “Lo afirmaron públicamente sus voceros y actores políticos”, recordó Chávez.

En este sentido, lamentó que en ese entonces los resultados hayan derivado en un fallo negativo para Bolivia, esto en función a las pruebas que se aportaron a lo largo del proceso, reiterando que la Corte puede fallar en favor o en contra de alguno de los Estados en litigio, tal y como sucedió en 2018. “Se indicó que no existe obligación alguna de Chile para negociar por un acceso soberano al océano pacifico. Eso verdaderamente les ha sorprendido”, dijo.

Tras la finalización de la fase de audiencias orales en el proceso por el status y uso de las aguas del Silala, en abril de este año, el embajador boliviano en los Países Bajos y agente ante la CIJ, Roberto Calzadilla, manifestó que Bolivia espera un fallo “equilibrado” que permia resolver el conflicto con Chile.

“Esperamos un fallo equilibrado que nos ayude a resolver esta controversia y allanar el camino. Bolivia saldrá siempre adelante”, indicó el diplomático.

De la misma forma, el canciller del Estado, Rogelio Mayta, pidió que mediante el fallo que emita esta Corte, en los próximos meses, se respete la soberanía nacional y se preserven los derechos de los bolivianos.

«Esperamos que este fallo que emita la Corte sea equilibrado, que atienda a los criterios que Bolivia ha expresado, a los documentos que ha presentado, y esperamos que en ese marco se preserven los derechos de nuestro país y de nuestro pueblo», afirmó en conferencia de prensa desde La Paz.

Durante la primea quincena del mes de abril, tanto Bolivia como Chile presentaron sus alegatos orales ante este tribunal internacional, expertos contratados por ambos países argumentaron sus posiciones en relación a la naturaleza y el uso de los recursos hídricos provenientes de los manantiales ubicados en territorio nacional. «Nuestra posición siempre ha sido el diálogo y la conciliación con un país hermano, fundamentada en estudios técnicos y científicos», agregó.

En octubre de 2018, la Corte Internacional de Justicia de La Haya dictaminó negar, por 12 votos contra tres, que se haya establecido una obligación de Chile para negociar un acceso al océano Pacífico en favor de Bolivia, rechazando los argumentos presentados para obligar a una negociación por una salida soberana al mar.

El entonces presidente de esta instancia internacional, el somalí Abdulqawi Ahmed Yusuf, sostuvo que, “La Corte concluye que los documentos presentados no representan una obligación de Chile de negociar una salida al mar para Bolivia”, sin embargo, se precisó que el fallo no impide continuar con negociaciones entre ambos Estados.