El senador por Comunidad Ciudadana (CC), Rodrigo Paz Pereira, sostuvo que las recomendaciones emitidas por el relator especial de las Naciones Unidas, Diego García-Sayán, son un mensaje claro al gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS) y revelan la necesidad de transformar la justicia en lugar de solo hacer reformas.

Paz recordó que ya se conocieron otros estudios e informes en los que se coincide en la recomendación de efectuar cambios en la justicia boliviana, por lo que el reciente reporte solo confirma esta realidad.

“Han habido dos informes de expertos y salió ayer (miércoles) el informe del señor García-Sayán, algunos dicen que hay que reformar, yo les digo que hay que transformar”, sostuvo el parlamentario.

El legislador de oposición precisó que las bases en las que se cimienta el actual sistema de justicia datan de tiempos que no tienen nada que ver con la actual Constitución Política del Estado. “La justicia boliviana está basada en una copia de la justicia argentina y esta de la italiana que data de la época de Bonaparte”, dijo.

Sobre las justificaciones oficialistas en las que se señala a los cuestionamientos al actual sistema de justicia como un problema que data del pasado, antes de asumir el Gobierno, Paz recordó que el Movimiento al Socialismo lleva alrededor de 18 años en el poder, por lo que forman parte del pasado de la justicia y también de la incapacidad para atender sus falencias.

“Estamos temblando como sociedad, es una señal de que la sociedad por sí sola, tal vez el día de mañana, tenga que tomar decisiones de aquellas que no está tomando el Gobierno nacional bajo recomendaciones de expertos internacionales y la última dada por el señor García-Sayan”, expresó.

En relación a la posición del ministro de Justicia, Iván Lima Magne, quien calificó el informe final de García-Sayán como un “aporte fundamental” para dar continuidad al proceso de transformación judicial en Bolivia, el asambleísta destacó que se hayan dado puntos claves de una reforma, sin embargo también se debe reconocer que el partido gobernante forma parte del pasado de la justicia.

“Está temblando la justicia y están temblando los bolivianos porque no creen en esta justicia, es más le tienen miedo, y alguna reacción tendrá que darse para que desde la sociedad se pueda generar un nuevo proceso, no de reforma, de transformación”, sostuvo.

En su informe final, el relator especial de las Naciones Unidas para la independencia de magistrados y abogados, Diego García-Sayán, concluyó en que existen puntos que deben ser atendidos por el Estado boliviano como el acceso a la justicia, la lucha contra la impunidad, la protección de las mujeres frente a la violencia de género y abordar la alta proporción de personas privadas de libertad sin sentencia, entre otros aspectos.

Además, observó que la elección por sufragio universal de integrantes de las altas cortes no ofrece garantías suficientes para evitar la injerencia política, “no asegura el nombramiento de personas idóneas ni ha generado legitimidad en los procesos de votación”, señala.

Por ello, formuló 20 recomendaciones en las que se insta a respetar la independencia del Sistema Judicial y priorizar la designación de un titular en la Defensoría del Pueblo.

Desde su cuenta de Twitter, el ministro Lima sostuvo que para alcanzar una reforma judicial se debe alcanzar el consenso, el diálogo y el acuerdo entre bolivianos. “Nos adherimos al planteamiento del Relator García-Sayán en su Informe. El consenso, el diálogo, el acuerdo, entre todos los bolivianos son la base estructural para una política pública de largo alcance como es la transformación de la justicia”, expresó la autoridad.

Afirmó que será “un aporte fundamental” para continuar con el proceso de transformación judicial en Bolivia y destacó la imparcialidad de este aporte para el proceso. “Es un informe de un tercero imparcial que se presentará ante la ONU”, afirmo durante una entrevista televisiva.