Sin la inyección de recursos por parte del Estado, el nuevo diferimiento de pagos al sistema financiero pone en riesgo su estabilidad y puede agravar la crisis económica que vive el país, señala un comunicado de la Cámara de Industria y Comercio de Santa Cruz (Cainco).

Informa que la pandemia del covid-19 ha generado una interrupción de la cadena de pagos ya que las medidas sanitarias han impedido que productores, trabajadores y consumidores puedan realizar normalmente sus actividades.

“Esta caída generalizada significa que las familias y las empresas dejaron de percibir al menos 20.000 millones de bolivianos. La menor disponibilidad ha impactado también en la capacidad de pago de las obligaciones financieras y tributarias”, señalan.

Por su parte, la CNI señaló, en un comunicado difundido el jueves, que la decisión gubernamental aprobada ralentizará aún más las actividades económicas por el impacto negativo de la decisión gubernamental en el rol de intermediación de las entidades financieras, advirtiéndose un deterioro en la gestión de captación y colocación de créditos con el consiguiente impacto negativo sobre la oferta de créditos a los diferentes sectores económicos.

Las medidas de política pública deben ser equilibradas y no favorecer a unos sectores en desmedro de otros sectores económicos. Las decisiones de política pública deben velar no sólo por el corto plazo y unos sectores, sino por el largo plazo y el conjunto de los sectores de la economía boliviana, sostiene.

Señalaron que el sector industrial se verá afectado por la decisión gubernamental, puesto que el acceso a financiamiento es vital para su reactivación.

Medidas

Cainco recordó que para evitar la falta de liquidez y genere problemas de solvencia, diversos países han activado durante la primera ola medidas de apoyo estatal a las entidades financieras para precautelar el ahorro de los depositantes. Estas incluyeron, entre otras medidas, fondos de garantías y líneas de financiamiento con condiciones preferenciales.

El jueves, Asoban informó que se presentó propuestas a las autoridades nacionales para reactivar la economía y que el sector financiero apoye a esta tarea, y nombraron que una medida para este objetivo sería la creación de fondos de garantía.

Mientras el comunicado de la Cainco sostiene que se debe recordar que en el pasado ya se habían aplicado con éxito mecanismos de este tipo en el país, como en la crisis de 2001, mediante el Fondo especial de Reactivación Económica.

Su objetivo era facilitar las reprogramaciones de las unidades productivas afectadas, manteniendo el flujo de recursos al sistema financiero y así evitando las vulnerabilidades que hoy pueden profundizar con una medida incompleta. Con la modalidad de periodo de gracia acordada entre el gobierno y el transporte, no se podrá contar con recursos para las colocaciones o préstamos que son urgentes para reanudar plenamente las actividades económicas.

Por tanto, Cainco demanda al gobierno nacional apoyar urgentemente al sector productivo y al sistema financiero, inyectando recursos que faciliten la reactivación económica de forma sostenible, de no hacerlo, se pondrá en riesgo la estabilidad del sistema financiero en su conjunto con sus consecuentes impactos negativos en la economía del país, concluye.

Por su parte, el economista Gabriel Espinoza, en su cuenta de twitter señala que ampliar el diferimiento no sólo afecta a los bancos, afecta a toda la economía; ya se sabía que se venía este conflicto, y las medidas que podían mitigar los problemas ya se conocían; y la obligación del gobierno es velar por toda la economía.

HOTELEROS

Por su parte, la Cámara Hotelera de La Paz, en nota dirigida a las autoridades nacionales, hicieron conocer que se declara en emergencia, y que a la fecha el sector presenta pérdidas irreparables y pone en riesgo la operación de las mismas.