“Lo que nosotros estamos solicitando es que las autoridades del municipio permitan que de una vez por todas podamos reactivar nuestras actividades económicas, porque ya son nueves meses que hemos cerrado nuestros negocios, donde muchos de nosotros tuvimos que sobrevivir junto a nuestras familias, por eso ahora con esta condición presentamos este simulacro que cumpliremos de forma estricta”, explicó el dirigente Choque.
Entre las medidas de bioseguridad que hicieron conocer está la eliminación de las pistas de baile, que aglomeraba a cantidad de personas, para hacer cumplir el distanciamiento social.
Entre los protocolos está también el aforo con el 50 %, la utilización de vasos desechables, la desinfección constante de las mesas y un equipo de personal debidamente equipado con los requisitos, como los guantes, barbijos, lentes y el uniforme de material especial para el caso.
La preocupación de los propietarios de estos negocios no solamente es por el entorno familiar que también trabaja con ellos, sino por los empleados que tienen en diferentes puestos que todo este tiempo tuvieron que sobrellevar esta época de pandemia.
“Detrás de todos estos negocios asociados en Aspebrek, por lo menos somos 5.000 familias que tuvimos que buscarnos diferentes formas de vida, porque al cierre de nuestros negocios durante todo este tiempo también hemos dejado de tener los ingresos económicos que significaban la alimentación de nuestros niños”, finalizó el dirigente.